Nemo se irrita, se estresa y se pone agresivo con el ruido de los motores de los barcos.

15 de junio 2021

Los cambios hormonales causados por el ruido de los motores de los barcos hacen que Nemo se esconda, se salte sus comidas y ataque más a sus vecinos, angustiándolos.

Nemo se irrita, se estresa y se pone agresivo con el ruido de los motores de los barcos.

En nuestro estudio en los arrecifes de coral alrededor de Moorea en la Polinesia Francesa, un equipo internacional de científicos expuso 40 pares de peces payaso a grabaciones de sonidos naturales de arrecifes y a ruidos producidos por motores de barcos hasta por dos días. El ruido proveniente de los motores de barcos llevó a los peces payaso a esconderse entre los tentáculos protectores de sus anémonas, saliendo menos para alimentarse y se volvieron más agresivos con los peces-señorita-dominó con quien comparten las anémonas.
Los investigadores – de Francia, Chile y del Reino Unido – también descubrieron que los peces payaso, estresados por el ruido de los motores de barco, no fueron capaces de responder apropiadamente a un segundo estrés, exponiéndolos a un mayor riesgo de amenazas, tales como depredadores y cambio climático.

El estudio, publicado en el journal Environmental Pollution, descubrió que los peces expuestos al ruido de los motores de los barcos presentaron un aumento en los niveles de la hormona del estrés, cortisol y también de las hormonas reproductivas testosterona y 11-ketosterona, lo que correspondió a los cambios de comportamiento. Estos niveles hormonales medibles permiten comprender cambios de comportamiento complejos que podrán ser utilizados para desarrollar herramientas para disminuir los impactos causados por los ruidos.

La autora principal, la académica de la École Pratique des Hautes Études (EPHE) PSL Université Paris, CRIOBE, en Francia, Suzanne Mills, afirmó: “los altos niveles de cortisol después de dos días de exposición sugieren que los peces payaso se estresan de manera crónica debido al ruido del motor de barco. Esto compromete el sistema de respuesta al estrés, dejando los peces incapaces de responder apropiadamente a futuras situaciones de estrés. Si estos eventos estresantes incluyen un depredador, el ruido del motor podría tener graves consecuencias.”

Ricardo Beldade, profesor de la Pontificia Universidad Católica de Chile, anteriormente en el Centre National de la Recherche Scientifique (CNRS), CRIOBE en Francia, sostuvo: “los peces payaso defendían su territorio (anémona) de manera agresiva durante los ruidos de motor de barco, lo que les demanda más energía. Sin embargo, debido a que se escondían más y se movían menos para alimentarse, incluso después de que haya terminado el ruido del motor de los barcos, ellos podrán no ser capaces de compensar a través de mayor alimentación, con impactos potencialmente perjudiciales en el crecimiento e incluso en su sobrevivencia”.
Andy Redford, profesor de Ecología del comportamiento en la University of Bristol, dijo: “experimentos que consideren comportamiento de animales salvajes en medio natural – como lo hecho en este estudio – son cruciales si pretendemos comprender completamente los impactos del ruido de origen antropogénico. Nuestros resultados evidencian que los cambios de comportamiento debido al ruido antropogénico son probablemente debido a alteraciones en las respuestas al estrés (cortisol) y ciertas hormonas esteroides”.

La científica Sophie Nedelec, University of Exeter, agrego: “ahora sabemos que las respuestas hormonales son los mecanismos que conducen a respuestas de comportamiento debido al ruido de los motores de los barcos, podrán tornarse una herramienta útil en la regulación. Podremos ser capaces de prever la duración y/o el intervalo de exposición al ruido de los motores de los barcos que permitan a los peces volver a sus comportamientos normales.”

Steve Simpson, profesor de Biología Marina y Cambio Global en la University of Exeter, dijo: “respuestas hormonales a diferentes ruidos de motores de barcos, diseños de propelas y control espacial de actividades náuticas pueden ser comparadas para reducir el impacto de este contaminante global prevalente. Respuestas hormonales son actualmente una herramienta subutilizada en la gestión del ruido de los cientos de miles de barcos que navegan alrededor del mundo.”

Mills resumió: “nuestros nuevos descubrimientos destacan la necesidad de controlar el ruido antropogénico en hábitats marinos protegidos.”

Nemo se irrita, se estresa y se pone agresivo con el ruido de los motores de los barcos.

Paper:
‘Hormonal and behavioural effects of motorboat noise on wild coral reef fish’ by Mills, S.C., Beldade, R., Henry, L., Laverty, D., Nedelec, S.L., Simpson, S.D., & Radford, A.N. 2020 in Environmental Pollution.